Hace casi cinco meses que no escribo absolutamente nada en este blog, al principio tuve excusas pero llego un momento en que simplemente lo abandone, no deje las redes pues estuve más activa que nunca en instagram y snapchat pero me olvide de mi blog. Hoy vuelvo no para excusarme por la desgana porque considero que los blogs son esos espacio de libertad donde poder expresarte de la manera que desees y dentro de esta libertad está incluida la desidia, sino más bien para explicaros (y explicarme) las razones de desistir como blogger. Para ello os voy a contar mi andadura en el mundo de los blogs.
Comencé con mi blog cuando tenía 16 años (hace ya 10 años) y lo cree porque necesitaba encontrar un lugar donde expresarme a través de la escritura, la cual siempre fue mi forma de comunicarme, era un blog donde dejaba volar esa cierta vocación de escritora que siempre he tenido, lo tuve durante seis años y en el volqué los que considero los peores años de mi vida, pero cuando esa sobra oscura se disipo me di cuenta que aquellos textos oscuros y peligrosos no se identificaban para nada con la persona que era en ese momento, como una forma de dar carpetazo a esa época, lo cerré.
Sin embargo, cuando una tiene la rutina de escribir es difícil dejarla atrás y no sentir el gusanillo que te obliga a jugar con las palabras, por eso ese mismo año me abrí otro blog dedicado a una de mis pasiones: El cine. Y aunque me encanta escribir sobre ello, siento que soy una persona demasiado compleja para ceñir mi vida a un solo tema, yo necesitaba más, necesitaba un espacio donde poder escribir sobre lo que quisiera, sin atarme un tema, un blog que fuera un reflejo de lo que soy, variada y compleja (como somos todos), así nació hace siete meses "Paulina de otro costal".
Comencé con el firme propósito de escribir tres entradas a la semana, las primeras semanas lo cumplí pero acabado los temas principales, sentí un cierto desasosiego, vi como la musa se marchaba y como lo que hasta ese momento era un placer se convertía en una odiosa obligación, por eso, después de muchos meses de reflexión creo que mi error fue obligarme a escribir entradas todas las semanas cuando hay días en los que simplemente no tienes nada que decir, sé que el mayor error que puede tener un blogger o videoblogger es no publicar de forma habitual porque eso crea desgana en los seguidores, pero siendo sincera os diré que jamás he tenido intención de tenerlos y como nunca tuve tal motivación, no me tengo que preocupar de ser fiel a unos seguidores que no tengo, a fin de cuenta el éxito no reside en conseguir una meta, sino en hacer algo que realmente te guste mientras aspiras a alcanzarla.
Y con una no promesa de volver a escribir, me despido, recordandos que estoy en instagram y también en snapchat en los dos sitios como paulinacostal. Que tengáis un gran día
